Cambiar el mundo

¿Sabes, Zoe? Nosotros, tus padres, somos profesores.

Papá ha trabajado 37 años dando clase de Matemáticas en institutos de enseñanza secundaria y 34 en la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED).

Como dice Bruno, "¡es el mejor profesor de números del mundo!"

Su padre, tu abuelo Luis, que murió cuando papá era un niño, también trabajó como profesor. Asimismo, algunos de sus tíos y uno de sus hermanos también se han dedicado a la docencia.

En mi caso, soy nieta, hija, sobrina, hermana, prima y pareja de maestros y profesores. Desde Educación Infantil a la Universidad. Y llevo 15 años trabajando como profesora de Música en Secundaria.

Para mí es la profesión más noble y la más bonita. Enseñar a pensar, a tener un pensamiento libre, educar... es la mejor manera de intentar cambiar el mundo.

Hay un proverbio chino que dice: Si haces planes para un año, siembra arroz. Si los haces por dos lustros, planta árboles. Si los haces para toda la vida, educa a una persona.

Abrirles nuevas puertas a la música a chicos adolescentes me parece un privilegio e intento hacerlo mejor cada día.

Me gustaba tanto el instituto, que decidí quedarme...