Creo que desde hace unos años el tercer lunes de enero se celebra en el Reino Unido el Blue Monday, el día más triste o deprimente del año, teniendo en consideración distintos factores como la meteorología, la famosa cuesta de enero, los propósitos de año nuevo abandonados, etc., hasta el punto de convertirse en uno de los términos más utilizados en Twitter.
Todo ello consecuencia de un estudio para una campaña publicitaria que tomaba el nombre de la emblemática canción del grupo New Order y el espíritu de I Don´t Like Mondays (1979), de los Boomtown Rats.
Para mí hoy ha sido un poco Blue Monday, porque me he incorporado al trabajo después de mi permiso de maternidad y, aunque te dejaba en las mejores manos, las de tu padre, me daba un poquito de pena separarme de ti.
Ayer te lo expliqué, te conté que por la mañana ibas a acompañar a tus hermanos al cole con papá y que nos veríamos después de la siesta.
No sé qué entendiste pero te quedaste muy seria mirándome y me diste un beso.
Al final el día no ha sido tan blue porque mis alumnos y mis compañeros me han recibido con mucho cariño y esta tarde, al verme, me has dado un abrazo y muchos besos mientras gritabas de alegría.
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