Este fin de semana ha sido muy especial porque hemos recibido la visita de Carmen.
Bruno y Ariel estaban muy nerviosos preguntando a cada rato cuándo iba a llegar.
Cuando la has conocido y has visto que tus hermanos, papá y yo la recibíamos encantados, te has mostrado muy simpática y cariñosa con ella.
Habéis disfrutado mucho con los originales regalos que os ha traído (entre ellos, una preciosa muñeca recortable con figurines magnéticos que se llama como tú, Zoe) y ha sido un encuentro de auténtico capricho.
También tuvimos un ratito para ponernos nosotras al día, aunque me supo a poco...
También tuvimos un ratito para ponernos nosotras al día, aunque me supo a poco...
Muchas gracias, amiga del alma, por tu generosidad, infinita paciencia y mimos por toneladas con los peques.
Te llevo siempre en mi corazón.
Zoe: es imposible no quererte nada más conocerte. Me recibiste con una gran sonrisa y me robaste el corazón. He disfrutado mucho contigo, con tus hermanos y con tus padres, siempre me hacéis sentir tan bien que... No tengo palabras... ¡sois maravillosos!
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